![]() |
![]() |
EL AVARO Y EL ORO
Uno de sus vecinos observó sus frecuentes visitas al lugar y decidió averiguar que pasaba. Pronto descubrió lo del tesoro escondido, y cavando, tomó la pieza de oro, robándosela. El avaro, a su siguiente visita encontró el hueco vacío y jalándose sus cabellos se lamentaba amargamente. Entonces otro vecino, enterándose del motivo de su queja, lo consoló diciéndole: -Da gracias de que el asunto no es tan grave. Ve y trae una piedra y colócala en el hueco. Imagínate entonces que el oro aún está allí. Para ti será lo mismo que aquello sea o no sea oro, ya que de por sí no harías nunca ningún uso de él.
¿ PARA QUÉ ADULAR?
-Si yo te diera el veinte por ciento de todo el oro que poseo, ¿me adularías? -preguntó el rico. -El reparto sería demasiado desigual para que tú merecieras mis cumplidos -contestó el pobre. -¿Y si yo te diera la mitad de mi fortuna? -Entonces seríamos iguales, ¿con qué fin adularte? -¿Y si yo te lo diera todo? -En ese caso, ¡no veo qué necesidad tendría de adularte!
I Inicio I Locales I Internacionales I Nacionales I Columnas I Entretenimiento I Deportes I Clasificados I Publicidad I Escríbanos I Conózcanos I English Section I Advertise I Contact us I Archivo I Enlaces I
El Puente, LLC. © |
|||
![]() |
|||||
![]() |
|||||
![]() |
|||||
![]() |
|||||
![]() |
|||||
![]() |
|||||
![]() |
|||||
![]() |
|||||
![]() |
|||||
![]() |
|||||
![]() |
|||||
![]() |
|||||
![]() |
|||||
![]() |
|||||
![]() |
|||||
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |