En la víspera del décimo aniversario de DACA, un nuevo análisis de FWD.us resalta la década de contribuciones por los Dreamers y el futuro incierto de esta política

Debido a la falta de acción por el Congreso, las amenazas legales inmediatas pudieran acabar con una política sumamente exitosa que ha ayudado a que una generación de personas jóvenes construya familias y vidas en los Estados Unidos.

Un nuevo informe de FWD.us publicado hoy antes del décimo aniversario de la creación del programa DACA muestra que diez años después de que la administración Obama creara la política de la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), las protecciones otorgadas por la política han ayudado a los beneficiarios de DACA a construir sus vidas en los EE. UU., graduarse de sus estudios superiores, adelantar sus carreras y establecer sus propias familias. El informe compara cómo ha crecido el grupo inicial de aquellos que recibieron DACA cuando primero se anunció la política en el 2012. También compara nueva información sobre la población actual de personas con DACA. Ahora que la política está bajo amenaza, habrá consecuencias devastadoras si el Congreso permite que el sistema de tribunales tire abajo las vidas de cientos de miles de jóvenes y de sus familias en todo el país. 

La juventud que comenzó principalmente como estudiantes de escuela superior o de universidad ahora están construyendo sus carreras profesionales y familias. Sin embargo, a pesar del tiempo que ha transcurrido desde la instauración de DACA, del apoyo abrumador de una mayoría bipartidista de estadounidenses para que haya una solución, y de los beneficios inmensos que otorgan a nuestra nación, el Congreso ha fallado a la hora de convertir en política esta ley. Esto deja a cientos de miles de beneficiarios de DACA y a millones de familias en un limbo. Una vista en el tribunal federal en julio y una decisión anticipada en el otoño pudieran acabar con la política en su totalidad, lo que significa que se eliminaría el estatus legal de personas inmigrantes que han construido sus vidas enteras en los Estados Unidos. 

Según los estimados de FWD.us en el nuevo análisis, en el 2012, cuando se creó el programa:

•La edad promedio de los beneficiarios de DACA era de 21 años; 
•Casi la mitad (45%) de los solicitantes aprobados estaban matriculados en la escuela secundaria o en la universidad;
•La mayoría (60%) de los beneficiarios de DACA participaban en la fuerza laboral;
•Solo un 38% de los beneficiarios de DACA se habían graduado de escuela secundaria; y
•Cerca de una tercera parte (35%) de los beneficiarios de DACA habían conseguido una educación universitaria 
•El 17% de los beneficiarios de DACA estaban casados; y 
•El 22% de los beneficiarios de DACA tenían hijos.  

Diez años después, los beneficiarios de DACA han entablado familias y carreras profesionales en los EE. UU. y están contribuyendo a nuestra economía y a las comunidades en momentos en los que más lo necesitamos. Ahora:

•La edad promedio de los beneficiarios de DACA es 28 años; 
•Solo un 15% de los solicitantes aprobados están matriculados en una escuela secundaria o en la universidad;
•La mayoría (85%) de los beneficiarios de DACA están participando de la fuerza laboral;
•Los ingresos de los beneficiarios de DACA han aumentado más de cinco veces;
•El 99% de los beneficiarios de DACA se han graduado de escuela secundaria;
•Cerca de la mitad ―47%― de los beneficiarios de DACA han completado alguna educación universitaria; 
•El 37% de los beneficiarios de DACA están casados; y 
•El 42% de los beneficiarios de DACA tienen niños, muchos de los cuales son ciudadanos estadounidenses. 

“Este análisis resalta los inmensos adelantos y cambios de crecimiento profesional que los beneficiarios de DACA han experimentado desde la instauración del programa. Y a pesar de que estadísticas pintan un cuadro vívido de los beneficios de la política, es crucial recordar que en riesgo hay vidas y familias de personas verdaderas si el Congreso no actúa para brindarles a los Dreamers una vía a la ciudadanía”, dijo el demógrafo principal de FWD.us, Phillip Connor. “Esta política ha impactado a familias en comunidades de todo el país. Muchos estadounidenses probablemente conocen a un beneficiario de DACA sin saberlo porque se han vuelto parte fundamental de nuestra sociedad y de nuestras vidas cotidianas – personas como Reyna Montoya, una maestra y beneficiaria de DACA de Phoenix; y enfermeros como Hina Naveed en Nueva York y Jesús Contreras en Texas son parte de las más de 835,000 personas jóvenes que se han beneficiado de este programa. Necesitamos acciones del Congreso ahora para que puedan seguir prosperando en el país en el que han estudiado, construido sus familias y trabajado todos los días”.